sábado, 9 de octubre de 2010

 

proceso de Evaluación. El facilitador debe fortalecer el deseo de desarrollo de la gente sin
convertirla en dependiente de la ayuda exterior.
Exponer y explorar las vulnerabilidades de la gente es un asunto sensible. Si no hay suficiente
énfasis en las capacidades, el proceso de EPRD puede enfocarse demasiado en las debilidades.
Esto puede ser desempoderador y causar dolor al traer a la mente los traumáticos acontecimientos
pasados. Las discusiones sobre las causas subyacentes de la vulnerabilidad de la gente
pueden ser muy sensibles si se refieren a personas en posiciones específicas de poder y a sistemas
tradicionales de creencias.
Si no hay una buena facilitación, la EPRD puede causar una de las siguientes reacciones:
■ una actitud fatalista donde las personas empobrecidas y marginadas comienzan a creer que
su vulnerabilidad tiene que ser permanente. Un facilitador cristiano puede compartir una
perspectiva diferente – que las personas empobrecidas y marginadas son valiosas para Dios, y
que todas tienen habilidades y potencial. Esto crea una esperanza para el futuro.
■ un aumento en la tensión entre aquellos que son vulnerables y las personas identificadas
como las creadoras o ignorantes de su vulnerabilidad. El facilitador puede ayudar al grupo a
pensar en situaciones en las cuales estas personas son o han sido útiles y a tomar en
consideración qué influye en las buenas o malas decisiones que toman estas personas.
Habilidades de facilitación
El objetivo del proceso de EPRD es aumentar el entendimiento de la gente sobre sus propias
vulnerabilidades y capacidades, de modo que pueda desarrollar enfoques positivos para mejorar
su situación. Los facilitadores deben evitar la tentación de extraer información de la gente local
y tomar decisiones por ella. En su lugar, los facilitadores deben enfocarse en permitirle a esta
gente reducir su propio riesgo de desastres.
Las personas pueden tener percepciones muy distintas del riesgo, dependiendo de su género,
riqueza, edad, educación, tipo de empleo y posición dentro de la sociedad. Los facilitadores
deben tener una mente abierta y evitar imponer sus puntos de vista.
Siguiendo algunos principios clave, se puede animar la apropiación local del proceso de EPRD:
■ Se debe aclarar a la gente local y acordar con ella el propósito de la EPRD.
■ El proceso debe llevarse a cabo con respeto y sensibilidad.
■ El proceso de Evaluación es tan importante como el producto o resultado. Invierta tiempo
en animar a que el proceso sea tan participativo como sea posible.
■ Cuando sea posible, los grupos de interés deben ser conformados por personas con
características similares, como edad, sexo, modo de sustento o etnicidad.
■ Al inicio de una reunión de grupo de interés las dinámicas o los rompehielos pueden ayudar
a la gente a sentirse más cómoda con los facilitadores y con otra gente.

0 comentarios: